NO A LA GUERRA, SÍ A LA PAZ. CONCENTRACIÓN DURANTE
LAS FIESTAS DE REINOSO DE CERRATO.
REINOSO de Cerrato ha terminado de celebrar sus fiestas en honor de Ntra. Sra. de la Asunción. Desde el día 14 al 17 de agosto. Inauguración de las fiestas por dos queridos personajes que presiden la Corporación Municipal de dos pueblos hermanados: Autillo y Husillos. ¿Sus alcaldes? - Ángel Castro y Jesús Nevares, respetivamente. Juegos infantiles, salchichada, bailes, juegos autóctonos, disfraces, concurso de tortilla popular, pasacalles y dulzainas, torneos triangulares de fútbol, grupos musicales amenizando las noches y contribuyendo al rítmico movimiento de los cuerpos, misa solemne y vino español para todo el pueblo y visitantes, hinchables, 97 personas buscando el jamón escondido bajo un número misterioso que aparecería en la rifa, entrega de premios a todos aquellos que sobresalieron en alguna de las muchas actividades que han hecho vibrar a los reinoseros y amigos que nos han visitado.
Fiestas plenas, magnífico ambiente, emoción de quienes se juntan para fortalecer la amistad, para recordar tiempos pasados, para conversar, para pasear, para subir a la cuesta de Santa Lucía, para comer juntos en el hogar familiar tal vez abandonado durante el año, pero siempre añorado.
Y también Reinoso supo salir del pequeño reducto del propio pueblo para asomarse al mundo. Un pueblo hermanado con otros cinco, tres de los cuales pertenecen al Estado de Jalisco, México, no puede encerrarse en un cascarón, por íntimo y acogedor que sea. Reinoso se asomó al Oriente Medio y vió a niños que mueren. Unos, bajo las bombas criminales; otros, bajo los efectos de la hambruna. Imposible callarse. Imposible no llorar, aun estando en fiestas. Y efectivamente, al salir de la misa del último día festivo, domingo, 17, a las 11.45 de la mañana, el pueblo en pleno más los amigos que entre los reinoseros se encontraban o expresamente vinieron de Palencia y de otros pueblos, se aglutinaron al lado de la iglesia, a la sombra de una de sus seculares paredes. Allí, encima de los muertos que hace siglos fueron enterrados junto a las bodegas, en el cementerio que entonces existía a las faldas del templo, y al cobijo del azul celeste, se celebró una CONCENTRACIÓN titulada “NO A LA GUERRA, SÍ A LA PAZ”.
El pueblo de concentró con dolor, con rabia y con pena. 20.000 niños palestinos asesinados, más de 60.000 personas muertas durante una guerra que no soluciona los conflictos, sino que contribuye al aumento del odio entre pueblos, una guerra que aniquila las ciudades, hospitales, escuelas, templos y universidades levantó la conciencia de Reinoso, un pueblo castellano, cerrateño que sabe de desgracias, de sequías y de incendios.
Se leyeron pasajes relativos a Israel y Palestina. Se enumeraron distintas noticias que resaltaron la masacre y la inhumanidad de que es capaz el hombre. Hubo música entre lectura y lectura y cuatro niños-niñas soltaron al aire a cuatro palomas blancas que llevaron en sus patas una frase de cariño y de fraternidad para esos otros niños que allá en Oriente pierden su vida, ven a sus padres fallecidos, y no podrán crecer en las condiciones que la infancia requiere, la justicia exige y el amor reclama.
La fiesta ha terminado. El genocidio ha empezado. El sentido común cerrateño pide, exige, clama por la paz mundial. Fue la mejor manera de cerrar la convivencia de cuatro jornadas que jamás olvidaremos. Fiestas del 2025 en las que la Corporación Municipal, su alcaldesa a la cabeza, se ha desvivido por servir al pueblo.
MRR.
Presidente de la AAR.
-----------------------------------------------------------------
PODEIS VER LAS FOTOS DE LA CONCENTRACIÓN titulada “NO A LA GUERRA, SÍ A LA PAZ”. AQUÍ
Por la PAZ en el mundo.
ResponderEliminar